domingo, 21 de diciembre de 2008

Jiri Trnka

La mano.



es terrorífico. me recuerda (oblicuamente) a ese imbécil de apellido irarrázaval, que hace esculturas de manos y las reparte por el mundo. un siervo de la Gran Mano.

Kafka no era original; Kafka era checo. los cuentos y las canciones de los países checos, que son conocidas sólo por las viejas y los niños, dicen lo mismo que Kafka y que este buen Jiri Trnka.

La esclavitud es hermosa, el señorío es horrible. un sistema no es malo porque hayan esclavos, sino porque hay amos. al abolirse la esclavitud en un lugar, los amos siguen queriendo ser amos y se conseguirán esclavos por donde sea. para ello, deben engañar: les dan una sensación de señorío a cambio de una esclavitud invisible. los métodos de invisibilizar varían entre una sociedad y otra. en cambio un esclavo (de corazón), en una sociedad que ha abolido el señorío, se inventará señores que no quieren en verdad ser señores; seguirá patrones inexistentes; se dará cuenta de ello, pero seguirá jugando, y será un maldito libre.

si se muestra una sociedad perfecta, se corre el riesgo de que la sociedad actual intente disfrazarse de ella (como el comercial de smartcom o algo así donde cantaban "power to the people"). si nunca se muestra, sino que se va llevando en silencio, realizando acciones precisas (que son como las tareas de un esclavo verdadero) que son la única forma de perfección que conocemos en el sentido de perfección como esfera, como lo que no se derrama. Estas acciones precisas, que más que ser perfectas en sí producen en quien las observa un sentimiento de acabamiento que es grato, como la unidad estética de Plotino, prefiguran en sí mismas cualquier supuesta "sociedad perfecta". una sociedad basada en lo impreciso, en una demora de la realidad, en el binomio aburrimiento-entretención, sólo puede cambiar mediante el elogio vivo de la acción precisa, partiendo de la más pequeña.

toda obra de arte es precisa. una árbola también es precisa. no vemos, o no queremos ver (con lo que ya es suficiente, si este querer es sincero), que tengan que ser de otra manera: si nos muestran un texto inédito de Kafka, lo leeremos confiando en su precisión, porque ya la hemos visto en ligazón al mismo nombre. así mismo, quien ve una puesta de sol y la disfruta no puede, aunque sea mínimamente, no querer un restablecimiento de la armonía a nivel social.

hagamos vasijas de barro y pongamos plantitas adentro; después, ya verán.


martes, 9 de diciembre de 2008

a divinanza

yo conozco los láser; son algo así como pistolas,
para matar chanchos espaciales que sólo yo podía encontrar.
ahora paseo libre por la casa, como un jubilado con buena pensión.
a veces duermo bajo las camas.

yo conozco los láser; ellos deben saber trabajar.
el futuro no sé si será mejor que el pasado,
pero al menos anda más rápido.

y yo quiero la lentitud de un mundo
que ha parado de girar.